Los tejidos reflectantes reciben un tratamiento de superficie nacarado o metalizado que actúa como barrera térmica y luminosa. Filtran los rayos del sol impidiendo la presencia de reflejos en el interior de la sala, y actúan como aislantes térmicos permitiéndonos controlar mejor la temperatura en el interior de la casa.

Filtran hasta el 94% de los rayos UV y reducen el consumo energético del habitáculo. Disponen de distintos grados de apertura para mantener la visibilidad hacia el exterior.

Diferentes colores en el interior y un reverso nacarado que evita los reflejos hacia el interior consiguiendo una elevada eficacia de confort visual.

Eficientes

Tejido ignífugo

Máxima seguridad y protección ante el fuego.

Respetuosos con la salud

Exentos de plomos, ftalatos y sustancias tóxicas.

Fácil mantenimiento y limpieza

Se pueden lavar fácilmente con paño húmedo o aspiradora.